“La inteligencia artificial ha sido llamada la electricidad del siglo XXI, el petróleo del futuro, incluso el nuevo dios de la modernidad. Pero... ¿qué pasaría si todo esto fuera una exageración? ¿Y si detrás del hype se escondiera una peligrosa cortina de humo que nos impide ver las verdaderas amenazas éticas, jurídicas y sociales que plantea esta tecnología?”