La vida de los libros es azarosa. Por ejemplo, hasta 1998 el escritor antioqueño Jorge Franco había publicado sin mucho ruido un libro de cuentos y una novela. Casi nada en su trayectoria presagiaba el éxito que le iba a caer del cielo en la Feria del Libro de Bogotá con la edición de Rosario Tijeras, su tercera obra, la más conocida de toda su producción literaria. Impulsada por una columna de Enrique Santos Calderón, la ficción se convirtió pronto en un fenómeno editorial, con ediciones en varios países. De ahí el personaje de la sexi sicario, que reparte besos y plomo, pasó al cine y a la televisión y se volvió un fetiche para paisas y extranjeros.Visto con la distancia de un cuarto de siglo, el impacto de Rosario Tijeras se explica –a lo mejor– con el argumento de que ese libro erotizó el narcotráfico y el sicariato. En ella convergen el impulso del sexo y de la muerte. En todo caso, más allá de hermenéuticas, EL COLOMBIANO conversó con Franco sobre el libro que le cambió la vida y lo hizo el paisa más leído en América Latina.