En este sermón estudiamos que todo creyente ha sido llamado por Dios a vivir de una manera digna de su llamamiento, conforme a Efesios 4:1–6. Vemos cómo nuestra conducta diaria debe reflejar humildad, amor y unidad, en coherencia con lo que somos en Cristo.
Hoy estudiaremos el Punto 1, que es: “Llamado a caminar dignamente”, donde profundizamos en la responsabilidad del creyente de vivir a la altura del supremo llamamiento de Dios, respondiendo con obediencia, gratitud y un compromiso real con la vida cristiana.