Hoy, hablaré sobre un tema delicado que puede herir sensibilidades, así que te invito a escuchar con calma y filtrar estas palabras como mejor creas. He observado que las personas con un temperamento fuerte, aquellas que gritan y reaccionan de manera agresiva, suelen tener un carácter débil. Aunque parecen tener control, en realidad carecen de las herramientas necesarias para convivir de manera equilibrada. Es como el dicho "perro que ladra no muerde": lo que aparentan con su ferocidad no es liderazgo ni cambio, sino una falta de herramientas emocionales. La próxima vez que te encuentres con alguien así, míralo con empatía y recuerda que todo tiene solución, pero solo si la persona está dispuesta a cambiar. Para Fluir Hoy: Hoy, reflexiona sobre cómo manejas las personas con un temperamento fuerte a tu alrededor. Recuerda que detrás de ese comportamiento a menudo hay una falta de herramientas para gestionar las emociones. Practica la empatía y, si te enfrentas a alguien con un temperamento fuerte, elige verlo desde una perspectiva comprensiva. Esto te ayudará a relacionarte mejor y a fomentar la paz en tu entorno.

Aquí en BCyF, te damos la bienvenida a un espacio donde afirmamos, reflexionamos y nos cuestionamos en tan solo un minuto cada día. 

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Produce: Na Q Ver Studios 

Voz y Guión: Iván J. Torres Guerra