Feeding (Alimentación): Se refiere a la evaluación y manejo de la nutrición del paciente. Incluye la evaluación de la ingesta oral, la necesidad de soporte nutricional y la monitorización de la alimentación enteral o parenteral.

Analgesia (Analgésicos): Se centra en el control del dolor del paciente. Implica la evaluación regular del dolor, la administración de analgésicos adecuados y la monitorización de su efectividad.

Sedation (Sedación): Hace referencia a la administración y el manejo de la sedación en pacientes que requieren ventilación mecánica o cuidados intensivos. Esto implica evaluar la necesidad de sedación, ajustar las dosis según sea necesario y vigilar los efectos secundarios.

Thromboembolism prevention (Prevención de tromboembolismo): Se refiere a la prevención de la formación de coágulos sanguíneos en pacientes hospitalizados, que puede ser especialmente relevante en aquellos con movilidad limitada. Incluye medidas como la movilización temprana, el uso de medias de compresión y la administración de anticoagulantes según las indicaciones.

Head of bed elevation (Elevación de la cabecera de la cama): Hace hincapié en mantener la cabecera de la cama elevada en pacientes en riesgo de aspiración o para prevenir úlceras por presión. Esto ayuda a prevenir complicaciones respiratorias y mejorar la perfusión tisular.

Universal precautions (Precauciones universales): Se refiere a la implementación de medidas de precaución estándar para prevenir la transmisión de infecciones. Esto incluye el lavado de manos adecuado, el uso de equipo de protección personal y la adhesión a prácticas de aislamiento cuando sea necesario.

Blood sugar control (Control de la glucosa en sangre): Se enfoca en el manejo de los niveles de glucosa en sangre en pacientes con diabetes o hiperglucemia. Esto implica el monitoreo regular de los niveles de glucosa y la administración de insulina u otros medicamentos según las necesidades individuales.

Infection control (Control de infecciones): Se refiere a la implementación de medidas para prevenir la propagación de infecciones nosocomiales. Esto incluye la higiene adecuada de manos, la identificación y el tratamiento temprano de infecciones, y la adhesión a las políticas y protocolos de control de infecciones.

De-escalation (Desescalada): Se centra en la evaluación y ajuste adecuado de la terapia antimicrobiana en pacientes con infecciones. Esto implica revisar y reducir la terapia antimicrobiana según los resultados de los cultivos y la evolución clínica del paciente.