La información de nuestra empresa lo que nos hace diferenciarnos de los competidores, es el activo más importante y por lo tanto debe tratarse como tal. Por otro lado, la información que nos comparten clientes y proveedores, debe ser tratada con máxima cautela, ya que los riesgos reputaciones y civiles son extremadamente altos. En este capitulo, nuestro socio Jorge Rodríguez nos cuenta más acerca de las cláusulas de confidencialidad que podemos incorporar a nuestros contratos y los Acuerdos de confidencialidad que debemos firmar con partes contratantes.