Cuando desees una pausa, cuando tu cuerpo físico este cansado, tu mente agobiada o sientas tu corazón abrumado, entonces concédete un momento, conéctate contigo a través de esta práctica maravillosa de relajación guiada. La aprendí de la mano del yoga, y cada día pongo más mi corazón en ella, jamás me falló en mis primeros meses de madre, y ha sido un bálsamo para los días de pandemia. Disfruta tu momento. Un abrazo.