Una amiga llamada Lucía me envía esta carta, y me pide que la lea, en una especie de auto-terapia sobre su propia vida, en un intento de sacar, de su mochila emocional, cosas negativas que resultan difíciles de cargar. Detrás de cada persona hay una historia, una vida, y esta, en concreto, es la suya. Sea como fuere, gracias por compartir tus sentimientos, tus experiencias.