"Señor, ¡que vea!", le pide el ciego de Jericó. Así se lo pedimos nosotros, cuando estamos a oscuras, dentro del "túnel" (noche oscura, le llaman los místicos)
"Señor, ¡que vea!", le pide el ciego de Jericó. Así se lo pedimos nosotros, cuando estamos a oscuras, dentro del "túnel" (noche oscura, le llaman los místicos)