Dios, o lo espiritual, no es, como muchas veces pensamos, un tema exclusivo de la gente “mayor”, sino que es todavía más relevante si lo consideramos en los días de nuestra juventud.
Dios, o lo espiritual, no es, como muchas veces pensamos, un tema exclusivo de la gente “mayor”, sino que es todavía más relevante si lo consideramos en los días de nuestra juventud.