Destinney Durón comenzó a jugar futbol cuando era una niña, pero su sueño siempre ha sido ser pilota aviadora en la Fuerza Aérea de Estados Unidos, donde nació. A sus 14 años tanto era su interés que estuvo a punto de enlistarse; asistió a una oficina de reclutamiento y preguntó si podía jugar futbol con los Marines. Su idea era clara: quería unir sus dos pasiones, pero la vida le tenía preparada otra cosa… En este episodio la delantera del Toluca, de 27 años, habla con Paulina Chavira de lo que la mantuvo en la cancha, de cómo ha sido para ella dejar todo para jugar futbol —incluida su familia y el país en el que creció—, primero en el América y luego con las Diablas Rojas, y de la fuerza que la ha mantenido de pie luego de las dos lesiones de ligamento cruzado anterior que ha tenido.
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