La Biblia habla acerca de los hijos de Isacar, que eran entendidos en los tiempos.
Sin embargo hoy la iglesia muchas veces parece perdida sin comprender correctamente los tiempos que esta viviendo, como le sucedió al pueblo de Israel, que tuvo a Jesús el hijo de Dios, el verbo hecho carne, caminando entre ellos, haciendo milagros y prodigios, pero no lo reconocieron, ni le recibieron.
Por eso Jesús se lamenta después sobre Jerusalén, diciendo: que no conocieron el tiempo de su visitación.