Para poder responder favorablemente a una situación inesperada y entender los procesos que suceden en las diferentes transiciones en la vida, debemos prepararnos para poderlas reconocer y que no nos afecten tanto.
La vida en sí es una transición, y en ella pasamos por procesos que de pronto no sabemos cómo manejar. Hay cuatro transiciones que todos hemos atravesado y tal vez sin saberlo, y sin saber cómo salir ilesos del proceso. Sin duda, Dios siempre, siempre está pendiente de nosotros y nos acompaña en estos procesos, sin embargo, es importante que nosotros desarrollemos y trabajemos en nuestra fortaleza espiritual, emocional, física y mental para seguir creciendo internamente, y estar preparados para la próxima transición.