Nuestra travesía llega a su fin, pero no la de nuestros protagonistas. Después de arreglárselas para sobrevivir a un golpe de Estado y a las persecuciones sin descanso de los militares, los partidarios de la utopía debieron salir de su patria. Más de doscientas mil personas abandonaron Chile en un esfuerzo por conservar la vida que les dio tiempo para empacar tan solo sus recuerdos. México, Cuba, Venezuela, Alemania, España y Suecia recibieron una nutrida migración de chilenos. También Colombia, a pesar de sus demonios internos, brindó una mano amiga a los chilenos en el momento que más lo necesitaban y acogió a centenares de personas. En el final de nuestra primera temporada, acompáñenos a descubrir cómo se enfrentaron algunos asilados y asiladas a una nueva cotidianidad en el exterior, mientras el gobierno de la Junta Militar chilena seguía fraguando planes para complicarles la vida desde la distancia.
Asimismo, les damos las gracias a las y los artistas que permiten el uso de sus obras musicales en la producción de Entre Américas. Su generosidad permite la creación y acceso a nuevos contenidos culturales: