Entrégate
Inténtalo para sanar,
inténtalo hasta sangrar,
da igual intentarlo sentado en la luna
o en el pecho de una bruja.
Inténtalo para enfermar,
inténtalo hasta ladrar,
da igual si no tienes papel
o tu mente está en un laurel.
El marco es despertar tus secretos,
confesar tus gozos,
desprender de la piel
lo que quiere caminar,
lo que está volando desde siempre.
Al igual que todos los corazones
amasados por la existencialidad
que nos amalgama la vista;
inténtalo quedando atrapado
en las mismas preguntas de siempre.
Balbucea la realidad, con esferas sin objetivo donde se recargan los sentimientos
juega un juego suicida no comprendido,
con tenor en la cabeza que pueda transformarlo todo.
Acuérdate de ti en lo secreto
porque estas en el camino no deseado
del cronista que visita su alma.
Cuando todo afuera estalle en silencio
y calles los gritos de tu alma
y el susurro de tu espíritu;
y por fin te tengas
y veas las llaves en tu mano,
sabrás que hacer.