Esti Quesada visita EPSA acompañada de Juan Flahn y dos amigues de Lérida, que están pasando unos días con ella en Madrid. Juan está a punto de terminar un ciclo en su vida, y está mejor que nunca, juvenil y fresca como el musgo en primavera. Esti también está a punto de terminar un ciclo en su vida, ese en el que era una pringada, para covertirse, un poco a su pesar, en una adulta sagaz y autoconsciente. Escuchamos unas pocas canciones sobre el angst, bebemos refrescos y fumamos cigarrillos, mientras ante nuestros ojos desfila, en panorámica, el Mundo.