Muchas personas piensan que el marketing trata de embaucar, engañar o presionar a los clientes para que acaben comprando un producto. Lo entiendo, porque como clientes todos nos hemos sentido así alguna vez. Pero, para mí, el marketing es una relación entre personas y, por lo tanto, se basa en tratar a tus clientes como te gustaría que te tratasen a ti. 

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