Tenemos una gran capacidad de adaptarnos a nuevas situaciones, superar decepciones y recuperar la motivación perdida.
Nuestro pecho suele ser la zona donde se “enciende” nuestra motivación.
Si mantenemos esta zona flexible, es más probable que podamos adaptarnos a lo que una nueva situación o un cambio requiere.
Este ejercicio se puede realizar sentado o de pie. Intenta abrir con plena atención y disfrútalo 🤗