Durante dos semanas, la COP26 reunió a líderes de todo el mundo, empresarios, periodistas y miembros de la sociedad civil en la ciudad de Glasgow, Escocia.
Fue una cumbre teñida de mucha expectativa y urgencia, si consideramos que originalmente iba a ser en 2020 y tuvo que posponerse por la pandemia.
El objetivo fue avanzar en acuerdos y negociaciones entre países para que tomen acción, con el objetivo de ir acercándose a una meta, una meta de la que todavía estamos muy lejos, y es la de limitar el calentamiento global a 1,5 grados centígrados con respecto a la era preindustrial para mediados de este siglo. Esta meta se estableció en lo que fue la COP21, allá por 2015, y forma parte de lo que se conoce como el Acuerdo de París.
La cumbre concluyó el sábado pasado con la firma de casi 200 países del Pacto de Glasgow, un documento que para muchos ecologistas tiene ‘‘sabor a poco“.
El documento propone que los países presenten a finales de 2022 nuevos compromisos de recortes de emisiones de gases de efecto invernadero, pero "teniendo en cuenta las diferentes circunstancias nacionales".
Hablé de todo esto con Tais Gadea Lara. Tais es periodista en cambio climático y fue enviada especial de RED/ACCION en la COP26, adonde vivió de primera mano todo lo que pasó en la cumbre.