Luego del hallazgo del Rancho Izaguirre, presunto centro de adiestramiento del Cartel Jalisco Nueva Generación, el actuar de la Fiscalía General de la República y de la fiscalía local, junto al “circo del horror” montado el pasado jueves, consiguió hacer “más daño” a las víctimas, según las palabras de Marcela Turati.
Marcela, quien ha cubierto por décadas lo que sucede alrededor de las desapariciones y otros crímenes de lesa humanidad, desde el dolor de las víctimas hasta los modos utilizados por el crimen organizado para torturar, asesinar y desaparecer, concluye que es necesario “exigir cuentas” y cuestionar las investigaciones. ¿Quién dio la orden de abrir el lugar de la manera en que fue abierto?
El pasado sábado la periodista compartió con la Boca Nostra una crónica de lo acontecido, misma que nace desde la empatía y el ejercicio crítico; y cuyas conclusiones se sostienen con el paso de los días a pesar los informes de Omar García Harfuch y de las 3 detenciones reportadas con relación al caso.