Imposible etiquetar a un camaleón, no se puede

enjaular a un tigre que nació libre, es un desperdicio mutilar tras las rejas a

un cóndor. Animal de olfato ultra potente para identificar las tendencias que

se cuecen en los universos subterráneos, libérrimo y veloz en su manera de

moverse entre la industria, Ghouljaboy es quizá el único artista

contemporáneo al que le han encasillado en todos los géneros posibles.

Del trap al sad emo por trabajos como ‘El

Rascal’ circa 2020 cuando habitaba en La Vendición Records y

colaboraba con Rojuu, Yung Beef, Pedro Ladroga, Pochi, Clutchill o Ambeats, de

la neo psicodelia al hyperpop,

de Mac DeMarco al city pop japonés. Él mismo se reivindicó a la vanguardia

desde España del dreamcore,

el movimiento del bedroom pop amplificado por las cuarentenas

pandémicas, con su estética inspirada en los sueños y un espíritu nostálgico,

que fue bautizado como la banda sonora de la Generación Z.

uno de los creadores más genuinos y geniales de la novísima ola de artistas

españoles. Es su trabajo más ambicioso, con colaboraciones que

van del norteamericano Dent May al francés Myd hasta Pat Jones (Toro y

Moi) Thorsheim (boy pablo) para las mezclas y masterización. Desde la

humildad que tienen los poseedores de una mirada que apunta más alto que la de los

demás, todavía sin hacer mucho ruido, Ghouljaboy llama con su nuevo álbum a las

puertas de algo muy gordo que con toda seguridad pronto sucederá en su carrera.

 

* Ghouljaboy es uno de los proyectos musicales

seleccionados desde España para el Observatorio Transoceánico 2023 impulsado

por la Fundación Gladys Palmera con el apoyo del Ministerio de Cultura y

Deporte y aliados como Indie Rocks! y Last Tour.

José Fajardo.