La riqueza puede hacernos perder la conquista de Dios, el bien supremo y puede romper la convivencia amistosa con nuestros semejantes

Tensión entre lo ya acontecido y lo todavia no alcanzado. En este tiempo, el cristianismo debe cultivar la fe, la esperanza y el amor

Para hacer grandes santos no es necesario hacer grandes cosas. Es necesario hacer grandes las cosas pequeñas. Es necesario aprovechar las cosas pequeñas de la vida diaria

Los que hemos experimentado la gracia immensa de haver conocido a Jesús no podemos menos que darlo a conocer

Ser fiel en lo que te encomienden. Tanto en lo pequeño como en lo grande

En verano tendremos más tiempo para orar, leer y dedicarnos a los demás

Cambiar el corazón a la luz del Evangelio. Por tanto, los ritos, sacrificios, oraciones, deben conducir al Evangelio

Sentirse amado de Dios y que los demás también lo experimenten

Cuando una persona hace el bién es libre y cuando hace el mal, ya es esclava de este mal

La misericordia de Dios Padre se hace presente en su hijo Jesucristo que se anonada, se baja hasta el último lugar