Este poscast describe el chirimen-gami-e, una técnica de impresión japonesa del siglo XIX que creaba grabados sobre papel crepé texturizado, dando una apariencia similar a la tela. Aunque inicialmente fue una novedad ocasional en Japón, su producción experimentó un resurgimiento a finales de la década de 1880 debido a la demanda occidental, particularmente para libros infantiles por su durabilidad. Editoriales como Hasegawa popularizaron estos libros, que se exportaron a Europa y Estados Unidos y se publicaron en múltiples idiomas. Incluso Vincent Van Gogh admiraba y se inspiró en la singular textura de estas impresiones.