Adán y Eva desobedecieron, entra el pecado al mundo y ahí todo se alteraría de manera terrible. Abusos, guerras, desobediencia, egoísmo, muerte, dolor, enfermedades, injusticias, vanidad, amor al dinero, ansias de poder, divisiones, entre tantas otras terribles consecuencias. Otros aspectos que se afectarían en la humanidad serían su falta de clara identidad, miedo, sentido de culpa y vergüenza. ¿Hay solución a esta calamidad? ¿Podremos volver a estar en una relación con el Creador? Sigamos meditando en Génesis capítulos 2 y 3. Aquí fue donde todo se dañó.