¿Sabéis de qué vamos a hablar hoy? Os doy una pista: estamos otra vez en septiembre, volvemos al trabajo, volvemos a la escuela, volvemos a nuestra rutina diaria. Vamos a ver.
La RUTINA DIARIA: verbos reflexivos en español
Primero, ¿qué verbos se utilizan para hablar de la rutina diaria?
despertarse
madrugar (cuando te despiertas muy pronto)
levantarse
lavarse (lavarse la cara, lavarse los dientes, lavarse el pelo)
peinarse, maquillarse (las mujeres, a veces)
afeitarse (los hombres, a veces)
vestirse
bañarse o ducharse
salir de casa
desayunar
ir al trabajo
comer
volver del trabajo
merendar
ir al gimnasio
hacer deporte
hacer los deberes
estudiar
cenar
ver la televisión
leer un libro
acostarse
trasnochar (si te acuestas muy tarde)
y por último, dormirse.
Algunos de estos verbos que hemos visto eran VERBOS REFLEXIVOS.
Los verbos reflexivos son verbos en los que, en su forma en infinitivo, detrás, tenemos un pronombre.
Por ejemplo el verbo “levantarse”. El verbo principal es el verbo “levantar” y tiene un pronombre “se”. Esto es porque la acción del verbo “levantarse” recae sobre el sujeto.
Para conjugar estos verbos solo tengo que poner el pronombre delante del verbo conjugado.
Los pronombres reflexivos son estos:
me
te
se
nos
os
se
Entonces, si conjugo en presente de indicativo el verbo levantarse, sería:
Yo me levanto
Tú te levantas
Él [ella/usted] se levanta
Nosotros nos levantamos
Vosotros os levantáis
Ellos [ellas/ustedes] se levantan
¡Es muy fácil!
Si queréis repasar un poquito el presente de indicativo, aquí os dejo el link para nuestro video de los verbos en presente regulares y también irregulares.
Atención: a veces el verbo reflexivo es, además, un verbo irregular.
El verbo, por ejemplo, “despertarse”, es un verbo irregular donde la vocal cambia: yo me despierto, tú te despiertas... entonces cuidado.
El pronombre reflexivo lo pongo por un lado, ¡pero el verbo tengo que conjugarlo correctamente!
Para ayudaros un poquito, os voy a decir qué verbos reflexivos que utilizo para la rutina diaria son irregulares.
un verbo irregular es “despertarse”, tiene cambio vocálico (yo me despierto);
otro verbo irregular es “vestirse” (yo me visto);
otro verbo irregular es “acostarse” (yo me acuesto).
Son todos verbos de cambio vocálico.
Otra cosa que necesito para hablar de mi rutina diaria son la EXPRESIONES DEL TIEMPO y DE LA FRECUENCIA. Por ejemplo, para hablar de las partes del día, en español decimos: por la mañana, por la tarde, por la noche, ¡siempre con “por”!
Repito, por la mañana, por la tarde, por la noche.
En español dividimos el día en tres partes, no en cuatro como en otros idiomas.
La mañana va desde que me despierto, hasta que como.
Después de comer empieza la tarde.
Después de cenar empieza la noche.
Seguro que ya sabéis que en España tenemos la fama de comer y de cenar muy tarde. ¡Comemos a las tres y cenamos a las nueve!
También puedo decir a medio día, a las doce del medio día o a medianoche, a las doce de la media noche.
Además, tengo unas EXPRESIONES DE FRECUENCIA que puedo utilizar para decir con cuánta frecuencia yo realizo estas actividades cotidianas.
Por ejemplo, de menor a mayor,