Nosotros tenemos un Dios de amor, misericordioso y que también hace justicia, nosotros como sus hijos tenemos que aprender hacer misericordia y justicia, ya que estamos hechos a su imagen y semejanza.
La misericordia y la justicia son dos cosas totalmente diferentes, por lo regular cuando dicen hacer justicia es que los que han hecho mal paguen, pero en realidad es aprender a ser justos y en misericordia no solo es tener compasión o ayudar a alguien espiritualmente sino también físicamente, pero aún va más allá y es aprender a perdonar de corazón.
Nosotros tenemos un respaldo muy importante y es la biblia, y ahí podemos encontrar algo muy interesante y es que todo el que permanece en él no peca, el que hace justicia es justo como él es justo y todo aquel que es nacido de Dios no práctica el pecado porque la simiente de Dios permanece en él y no puede pecar porque es nacido de Dios.
Todas nuestras obras de justicia no son para vanagloria de nosotros, si no, son señal de que el amor de Dios está en nosotros, que él nos ha adoptado como sus hijos, nuestra justicia no nos salva, si no es la prueba de que nosotros ahora hemos sido integrados por gracia a su pueblo y a ser llamados hijos de Dios.
1 Juan 3:1-9
Génesis 4:3-10
Lucas 10:30-37
Mateo 5:7
Miqueas 6:7-8
Romanos 12:19-21
Conoce más en Camino de Vida:
https://camvi.mx/
https://www.facebook.com/camvimx
https://www.instagram.com/camvimx/
https://wa.me/5215546818627