“La mayor lección de vida para mí fue aprender a tomar a las personas tal como son. Los argentinos son diferentes a los brasileños, a los mexicanos, a los estadounidenses, a los alemanes, a los italianos. Aprendí, también, que solo puedo cambiarme a mí mismo. Y eso es bueno”, sostiene el exfutbolista y entrenador alemán Jürgen Klinsmann.
El exdelantero de la selección germana conversó con Herederos del Cambio, repasó algunas de las grandes lecciones que aprendió a lo largo de su carrera, contó que seguir su instinto lo ayudó a trazar su camino profesional y habló acerca de cómo ayudar a los equipos a lidiar con la presión y con los desafíos que se presentan en momentos difíciles.