Encontrar un equilibrio entre el amor y el dinero puede resultar complicado.
Existen múltiples estudios confirman que después de la infidelidad, las peleas por dinero son la segunda causa de divorcios, y entre las principales causas de separación están las deudas, confirmando que el dinero y las finanzas familiares pueden llegar a ser un factor importante que termina deteriorando la relación de pareja, ya que el dinero no solo tiene valor económico, sino también emocional y social, pues se relaciona con aspectos como el poder, el control, el reconocimiento o el desarrollo personal.