No hay mejor conjuro que el de la música. Bien lo sabe una
de las personalidades más curiosas de la música afrolatina de las últimas dos
décadas largas: el afroamericano Otura Mun, sacerdote del ifá o babalawo en la
religión yoruba, y a la vez, una de las piezas fundamentales de la música
puertorriqueña de vanguardia, cuando a finales de la década de los
años ’90 se implicó en la producción de álbumes de artistas esenciales de la
isla como Cultura Profética, Calma Carmona o Mima.
Pero todo cambió cuando hace algo más de un lustro se
puso la toga de artista en solitario bajo el nombre de ÌFÉ, una suerte de
extensión de la vida espiritual que marca su activismo religioso, pero también
curiosamente inspirado en la facción tanto tribal de los rituales ancestrales yorubas,
como también por una idea absolutamente vanguardista, muy apegada a las
producciones electrónicas, utilizando herramientas como el auto-tune y
texturas propias de artistas de corte avant-garde.
Así lo había dejado claro hace cuatro años en el aclamado
“IIII+IIII”, que ya desde el
título, que aunque no lo creáis se pronuncia “Edgy-Og-Bay”, descubre la
inspiración yoruba de los símbolos de la religión Ifá. Por el mismo camino va “0000+0000”,
que se pronuncia “Yay-koon May-yee”, y que da incluso un paso adelante con
respecto al debut: se sigue jugando a la polirritmia ancestral, con cantos
rituales y plegarias sonoras que rinden pleitesía a dioses; pero íntimamente
conectado también con las tradiciones de la cultura afroamericana de Nueva
Orleans.
El repertorio se antoja
como una suerte de manifestación híbrida entre la cultura yoruba de Cuba y
Puerto Rico y la cultura religiosa afroamericana de zonas como Nueva Orleans,
pero manifestado a través de ÌFÉ como un médium que las conecta y que
las expulsa de su cuerpo a través de guiños que van desde el soul (“Voodoo
Economics”), el groove afrocaribeño (“Tu sabes k si”), una suerte de post-salsa
tecnotrónica (“Fake Blood”), el góspel yoruba (“Closing Prayer”) o un ritual religioso
para festivales como el Sónar (“Fireflies”). No sé cuál será vuestro Papa,
pero el mío es ÌFÉ.
Alan Queipo.