Una vez más, en 2 Reyes 8:1-6 la mujer Sunamita aparece para regalarnos una gran enseñanza de obediencia y fe en Dios. Israel sufrió una gran hambruna por 7 años, pero Dios no solo la guardó de sufrir durante ese tiempo sino que también le devolvió todo y más de lo que había perdido. El pastor Alan Rodríguez aprovecha este mensaje para animarnos a tener esperanza, paciencia y confiar que el Padre nos guarda y quiere bendecirnos.

Dios había cumplido la promesa a la Sunamita al darle un hijo, tiempo después le tocó pasar por una difícil situación y cuando todo parecía estar muerto, ella se echó a los pies de Dios y nuevamente él se glorificó. 2 Reyes 4:8-37. El pastor Alan Rodríguez continúa con esta hermosa historia donde el Señor hablará a tu corazón.

El Pastor Alan Rodríguez nos habla de la historia de una mujer Sunamita que por su entrega y su esmero para el reino de Dios recibe un milagro que no esperaba. Basado en 1 Reyes 4:8-37 ¡Te invitamos a escucharlo!

Los cristianos pertenecemos a la familia espiritual que es en Cristo, y como Hijos de Dios tenemos todas las bendiciones que Dios ha preparado para los que lo aman. En esta predica el Pastor Alan Rodríguez nos explica la importancia de formar parte de una iglesia local y los beneficios que eso trae para nuestras vidas.

Después de que nacemos de nuevo debemos crecer. En esta predica el Pastor Alan Rodríguez utiliza diversos ejemplos de la biblia para enseñarnos cómo podemos crecer en Espíritu, sabiduría, gracia, palabra y amor.

Juan nos dice que ahora somos hijos de Dios (1Jn 3:1-2), y en esta prédica el Pastor Alan Rodríguez nos enseña que para ser Hijos de Dios debemos creer en el sacrificio de Cristo, aceptarlo como nuestro Salvador, y nacer del Espíritu Santo.

Juan nos dice que ahora somos hijos de Dios (1Jn 3:1-2), y en esta prédica el Pastor Alan Rodríguez nos enseña que para ser Hijos de Dios debemos creer en el sacrificio de Cristo, aceptarlo como nuestro Salvador, y nacer del Espíritu Santo.

Jesús preguntó ¿Por qué me dicen Señor Señor, y no me obedecen? (Lc 6: 46, 9:57). Desde esta perspectiva, en esta prédica el Pastor Alan Rodríguez nos explica que si no hacemos lo que Jesucristo nos manda a hacer no lo podemos llamar Señor y nos enseña 3 claves para que seamos siervos obedientes.

Una de las áreas en las que el creyente debe crecer, es en procurar la llenura y el poder del Espíritu Santo. La Gloria de Dios es el poder del Espíritu Santo en medio de su pueblo. 

En esta predicación el Pastor Alan Rodríguez expone la necesidad que tiene el creyente individual y el cuerpo de Cristo de la Gloria de Dios para poder moverse el el plano sobrenatural. 

Cuando la Gloria de Dios se manifestaba, no había demonio que no se sujetara, enfermedad que no fuera sanada o muerte que no huyera. 

Por eso es tan importante, esperarla, anhelarla, desearla, quererla, pedirla, amarla e invitarla.

Este mensaje nos relata la historia de Uza, un israelita que por un pequeño tropiezo de los bueyes le costó la vida al intentar sostener el arca del pacto de Dios. ¿Tendremos una vida integra y digna para que la Presencia de Dios habite en nosotros? 

Pastor Alan Rodríguez