La vida parece muchas veces un laberinto. Los años se suceden como un misterio para todos y ni siquiera somos capaces de entender por qué pasan las cosas que pasan. Hay quien cree en la suerte, hay quien cree en la aleatoriedad y hay quien cree en la providencia de Dios, pero todos nos enfrentamos igualmente a la perplejidad de la vida. Los creyentes es verdad que creemos que es la providencia la que gobierna nuestra vida; pero tenemos razones para creer que, lo poco que podemos entender de la providencia, sólo se entiende en retrospectiva. Entendemos parte del plan de Dios mirando hacia el pasado. La mente conspiranoica tan común en nuestra época tampoco ayuda. Entendemos eso sí que lo que hay detrás de nuestras sospechas es muchas veces orgullo, egocentrismo y victimismo. El texto que veremos hoy nos muestra a una persona que interpreta el mundo que le rodea exclusivamente en base a sus miedos y sólo ve los agravios que cree haber recibido. La Biblia no asegura que vayamos a entender todo lo que nos pasa incluso mirando al pasado y sabemos que nuestros esfuerzos sólo son tentativos. No sabemos la mayor parte de lo que explica nuestra vida pero sí sabemos al menos lo más importante.... Podcast de Jose de Segovia sobre Primer libro de Samuel, Cap. 22 6ss