Me llamo Julia Castillo y dibujo en Instagram bajo el pseudónimo de La chica de las pinturas. Lorquiana hasta el corvejón. Vestida siempre de luto, pero con estilo de coplera chandalera. Paseante nocturna, a ritmo de seguidillas, de calles y bares de Sevilla. Espectadora abonada a primera fila de la vida marginal y el humor, como instinto de supervivencia. Solo hablo inglés para decir "very well fandango". Deportista de fachada y alegre comedora de platos de lentejas y altramuces. Amante del amor, sin amadas que la amen.

Nos adentramos en los sótanos de Instagram, un universo alternativo que descubriremos de la mano de sus protagonistas. Creadores en todas sus vertientes que, por primera vez, hablan para acallar los rumores acerca de su no existencia...

Julia Castillo. Sevilla, 1991. Alias La chica de las pinturas. Viene a darnos un brochazo en toda la cara: ¿Somos perezosos por vicio? ¿Huimos del compromiso? ¿Puede ser la felicidad una droga? Grandes dilemas que traslada a ilustraciones en las que, de una pincelada, casa a Goya con Lorca y entonces no te queda otra que rendirte a sus pies. Julia es un viaje a las entrañas, a la nostalgia del puro, el brandy y la esencia a naftalina...

Luz Rodríguez. Malagueña de corazón alemán. Trimadre que camina cual diamante en bruto por los senderos de la joyería sostenible. Un concepto a priori contradictorio, pero necesario en una sociedad que se resiste a jubilar viejas alhajas...

José Mariño Salas. Sevilla. Alias Pigadei, porque además de ilustrador es humorista. No hay cosa que le haga menos gracia que la artesanización: ¿Está siendo el arte profanado? ¿Por qué se vende la idea de que cualquiera puede ser artista? ¿Qué es el arte? Puede ser, y desde luego lo es, cuestión muy compleja, incluso indefinida por naturaleza, pero que nos remite a dilemas tan hondos como el propio término: ¿De dónde venimos? ¿Hacia dónde vamos? ¿Qué sentido tiene vivir? Para huir quizá del enigma, de la incertidumbre, hemos artesanizado no solo el arte sino la vida...

Luis Flox. Madrid, 1975. De los que sueñan despiertos. De los que alegran y (arreglan) el día con un «hola, hola». Entre el showman castizo y el dandi de Bollywood. Aquí viene a hablar de su libro, titulado «Y si me preguntas por qué necesitamos soñar, te diría: ¿por qué necesitamos respirar?».

En esta tercera entrega, hablamos de las despedidas: de las que nos marcaron, de las que nos liberaron, de las que aprendimos algo, de las que nos convirtieron en otra persona, de las que aún recordamos como si fuera ayer... Gloria nunca olvidará aquel día en que, sin ser consciente, vería por última vez a su abuelo Mariano. José recuerda, aún con asombro, cómo su abuela, enferma de alzhéimer, recobró fuerzas para despedirse de él con un «te quiero, Joselito». Las de Gloria y José son dos de las muchas historias, algunas tristes y otras esperanzadoras, que puedes escuchar en este #podcast.

En esta segunda entrega, hablamos del amorodio: ¿es posible amar y odiar al mismo tiempo? Esta es la pregunta y vuestras, las conclusiones...