Hay una gran diferencia entre usar el nombre de Jesús y caminar con Él.
En este episodio hablamos de poder espiritual, guerra invisible y autoridad verdadera.
Jesús no gritó, no peleó, no forcejeó…
Solo puso un pie en Gadara, y una legión de demonios se arrodilló.
Eso es autoridad.
Pero en Hechos 19, otros hombres intentaron hacer lo mismo pero no conocían al Jesús del nombre.
El poder no está en servir mucho, está en caminar cerca de Él.
Cuando sirves bajo Su carácter, el infierno no te ve a ti, ve al Cristo que vive en ti.