Asturias le debe mucho a Jovellanos. Nuestro territorio fue uno de los mejores campos de pruebas para que pusiera en práctica sus planteamientos reformistas e intentara hacer realidad muchos de sus proyectos. Estamos ante un auténtico ilustrado, político, magistrado de la corte, miembro de las Reales Academias, brillante ensayista, poeta y escritor de obras teatrales.
Retratado por Goya, intelectual irrepetible, con múltiples preocupaciones económicas, como explotar el carbón mineral con fines industriales; estudiar el léxico asturiano, impulsar la formación de marinos e ingenieros, y como no sociales como fue la organización de los hospicios.
Jovellanos, fue uno de los grandes ilustrados españoles, creía en la razón como factor clave en el desarrollo humano. Suyo es, en parte, el mérito de que hoy vivamos en un Estado moderno.