El 31 de octubre de 1517, decide clavar sus famosas 95 tesis en las puertas de la catedral del castillo de Wittenberg en Alemania. En ellas Lutero deja claramente establecido que «el verdadero tesoro de la iglesia es el sacrosanto evangelio de la gloria y de la gracia de Dios».
Sola gratia. Esto se logra mediante la acción fecunda de Dios que libera al ser humano de sus ataduras. Solo por medio de la obra de su Hijo Amado, Solus Christus, somos justificados para con Él. Ninguna obra o acción humana es requerida para la salvación, solo la fe de Jesucristo es suficiente, Sola fide, contrario a esto, dejaría de ser gracia. Como consecuencia del principio Sola scriptura se hizo indispensable traducir las Escrituras al idioma del pueblo. Soli Deo Gloria, la gloria sea dada solamente a Dios.
Mejías Ortiz, D. J. R. (2018). A 501 años de la Reforma Protestante. Recuperado 28 de octubre de 2021, de Educación Cristiana en el siglo 21 website: https://educristiana.com/2018/10/15/a-501-anos-de-la-reforma-protestante/