Los municipios de Jalisco tienen muchas leyendas que están llenas de enigmas y dudas por parte de quien las vivió y conto, también de quienes las han escuchado y han corrido la voz de lo que se dijo sucedió.
A lo largo del tiempo hemos escuchado de muchas piedras mágicas, de otras preciosas, y de unas cuantas más con espadas encantadas que solo aquel de alma pura podría sacar, incluso algunas de estas leyendas tienen su propia película.
Es por esto que en esta ocasión queremos trasportarte a un lugar dorado, donde su descripción es ambigua, pues podría señalarse como mágico, hechizado o encantado, solo aquel que dijo verlo y estar ahí sabría darle un término correcto, pues él logró entrar a este sitio a través de una piedra encantada, así como lo escuchas, no es ninguna historia de Hollywood, es una leyenda que se dice sucedió en Tonalá Jalisco en el mítico cerro de la Reyna.
Cuenta la leyenda que una tarde gris del mes de marzo, exactamente un viernes santo, Antonio presenciaba la agonía y futura muerte de su padre.