Antes de emprender el viaje hacia los tres mundos, Dante despierta en una selva oscura sin saber por qué llegó ahí. En esa selva se describe un paisaje inicial en el cual se ve el sol, las estrellas, la playa y la colina. El sol en representación de la divinidad de Dios, la colina es el camino que debe subir para llegar a Dios, y Dante no puede llegar a esa luz porque en el camino se encuentra con tres fieras que son obstáculos para él. Ahí se encuentra con Virgilio (Virginia) y después de una conversación con este, comienza su viaje. El Infierno representa al ser humano frente a sus pecados y sus funestas consecuencias. Cuenta con un personaje principal: Dante, que personifica a la humanidad. Luego cuenta con dos personajes secundarios: Beatriz, que personifica la Fe y Virgilio (Virginia), que hace otro tanto con la razón.