El docente coformador orienta en la complejidad de la práctica, es quien ayuda, contiene y habilita espacios para el ejercicio de los procesos de enseñanza aprendizaje, aportando su experiencia y el conocimiento que tiene de la institución asociada. El profesor formador es un docente que enseña dentro de la institución formadora a los residentes. En este contexto, el proceso de formación de docentes se da desde dos instituciones: la institución formadora y, la institución destino.La línea de reflexión de los procesos educativos son los suficientemente complejos, pero no difícil para reconocer los factores que la definen. La estructura de la práctica obedece a múltiples determinantes, tienen su justificación en parámetros institucionales, organizativos, tradiciones metodológicas.Uno de los objetivos como docente Formador, es lograr que los residentes sean cada vez más competente en sus prácticas dentro de la escuela asociada; y que acompañados por el Profesor Coformador, este aporte la experiencia, el conocimiento de las variables que intervienen en la práctica y la experiencia que los alumnos residentes hayan adquiridos para dominarlas dentro de la institución formadora.Las posibilidades reales de los residentes, en sus prácticas deben expresar múltiples factores: ideas, valores, hábitos pedagógicos. Por lo que la intervención pedagógica del docente coformador exige situarse en un modelo en el que el aula se configura en un microsistema, una organización social, una relación interactiva, una forma de distribuir el tiempo y los recursos didácticos, donde los procesos educativos se explican como elementos integrados en dichos sistemas.Desde esta postura se adopta el enfoque facilitador y motivador de la práctica reflexiva situándose en una postura más abierta en relación con el contexto de aprendizaje. El docente formador y el coformador deben mantener una actitud transformacional, mediante el diálogo reflexivo, creativo, innovador y motivador.Se concluye así, a través de una reflexión que: “para llevar a cabo el ejercicio de un docente formador y coformador, es necesario que el profesor formador y coformador establezcan relaciones de diálogo y que sean expertos en el objetivo de recoger y transmitir saberes; incorporándolas en sus prácticas para transformarla y mejorarla, y así facilitar el canal de diálogo abierto y reflexivo, que cada uno cuente con el medio para trabajar con sus objetivos de desarrollo, y que gracias al trabajo en grupo, la preparación para enseñar y educar al residente, sea de forma mediada, como guía y motivador para la construcción de conocimiento tanto individual como de forma colaborativa, utilizando el aprendizaje en la acción y de comunicación abierta y de retroalimentación permitiendo el desarrollo continuo de los residentes para evitar el aislamiento en sus prácticas áulicas.La intervención pedagógica tiene un antes y un después, que constituyen los elementos sustanciales en toda práctica educativa, y que se alcanza solo si, la bajada de las estrategias pedagógicas alcanzan la correcta apropiación de los saberes para las prácticas áulicas; y esto solo se da a través del profesor formador y coformador que tienen la capacidad de apoyar los procesos de aprendizajes en las prácticas cotidianas del residente y facilitan así el desarrollo de habilidades o capacidades para la construcción debida de los conocimientos de los futuros formadores...