La leyenda de la Papisa Juana es una de las historias más provocadoras y misteriosas que rodean la historia del papado, un relato que desafía la tradición y expone las complejidades del poder religioso en la Edad Media. Según esta controvertida narrativa, una mujer disfrazada de hombre logró ascender en las filas de la Iglesia Católica hasta convertirse en Papa bajo el nombre de Juan VIII en el siglo IX. Aunque la Iglesia Católica ha declarado esta historia como ficticia, la figura de la Papisa Juana sigue siendo un símbolo de rebeldía, intriga y resistencia a las normas impuestas.