Durante la dictadura de Batista, miles de cubanos salieron de la isla perseguidos por la necesidad sanguinaria del poder. Muchos de ellos vinieron a México, unos se quedaron y otros regresaron a formar parte de las filas de la Revolución.
Durante la dictadura de Batista, miles de cubanos salieron de la isla perseguidos por la necesidad sanguinaria del poder. Muchos de ellos vinieron a México, unos se quedaron y otros regresaron a formar parte de las filas de la Revolución.