¡Hay que vivir con amor! Para vivir en el amor es necesario decirle al Señor: sí. Un sí, sincero y decidido como el de María, para que, una vez en Dios, podamos ser luz en la oscuridad. Pequeñas acciones pueden generar grandes cambios.
¡Hay que vivir con amor! Para vivir en el amor es necesario decirle al Señor: sí. Un sí, sincero y decidido como el de María, para que, una vez en Dios, podamos ser luz en la oscuridad. Pequeñas acciones pueden generar grandes cambios.