En esta continuación poderosa de Una Nueva Temporada, el Apóstol Encarnación Moret nos guía a través del simbolismo profundo del vino nuevo. Después de la lluvia que prepara la tierra, llega el tiempo de cosecha—el momento de recolectar los frutos espirituales que Dios ha cultivado en nosotros.
Somos como uvas que, al ser prensadas, revelan lo que verdaderamente llevamos por dentro. Dios está preparando un vino nuevo—pero no puede ser almacenado en odres viejos. Nuestra mentalidad debe alinearse con la nueva temporada que Él ha anunciado. Solo conectados con Jesús, la vid verdadera, podemos producir fruto duradero.
Este mensaje entrelaza pasajes poderosos como Números 13:23, Mateo 26:27–29 y Lucas 5:37–39, revelando cómo la sangre de Jesús es el vino que sella un nuevo pacto. ¿Estás listo para soltar lo viejo y recibir lo nuevo?