Existe cierta trampa contemporánea de alabar la nostalgia, el tiempo pasado como algo insuperable. Si bien en el debut de la argentina Lara91k se respira esa melancolía del pasado, de su adolescencia, de la relación con su familia, de las primeras salidas a discotecas, de los desencantos e iluminaciones; da la sensación de que las veinte canciones que componen “Como Antes” ayudan no a trasladarnos a tiempos pasados, sino a admirar el presente de la artista.

La que fuera vocalista de la banda indie Coral Casino lleva un tiempo haciendo ruido en la escena urbana: forma parte de la misma crew que CA7RIEL, Paco Amoroso, Taichu y Chita; ha colaborado con artistas de la talla de Duki, Cazzu o 0-600; y es una habitual cuando se piensa en quiénes son los nombres candidatos a consolidar una carrera sólida en la escena del nuevo pop latinoamericano. Su debut es una manera de refrendar no solo el estatus de una artista que debería dejar de considerarse emergente, sino que en su repertorio convive ese espíritu mixto de nostalgia adolescente y pop futuro.

De ahí que en los tres cuartos de hora y veinte tracks que componen “Como Antes”, Lara Arteso coquetee con géneros que van desde el grunge-trap (“Blu”) al punk-pop tipo Avril Lavigne (“En mi cuarto”), el reggaetón de mirada amplia (“Eres para mí” o “Pegaíta”), la melancólica balada justinbiebera (“Fuckgurl” o “Rihanna”), el urban-house más popero (“Fuera de foco” o “Besándote”), el hyperpop (“Par de modelos” o “murdeR”) o el urban cortavenas (“Isla”). Una coctelera de tradiciones que han atravesado y atraviesan a una Lara91k que es la médium y el filtro de géneros y generaciones para edificar una nueva mirada pop en el ecosistema latinoamericano.

Alan Queipo.