Se nos va de ojo que existen unas reglas sociales invisibles que definen qué debemos sentir en determinados momentos de la vida. Son las reglas del sentir, definidas por la socióloga Arlie Hochshild, como normas culturales que orientan sobre la mejor manera de expresar lo que sentimos en situaciones de fuerte emotividad.
Guías que establecen patrones de género, conforme al orden patriarcal del que, por tradición secular, emanan. Los hombres no lloran es una pauta del sentir que establece una diferencia ente lo masculino y lo femenino, que se subvierte cuando el hombre decide llorar en público.
En este sentido, el empoderamiento femenino es un desafío a las pautas del sentir patriarcales, que no aceptan que la mujer exprese públicamente la rabia que siente por su perenne situación desigualdad o por los abusos y agresiones que recibe a manos de los hombres. Pautas del sentir que no están escritas, porque están inoculadas en la mente de hombres y mujeres, por lo que se hace necesario perseverar en la expresión pública de los sentires, sin diferencia de género, para conseguir unas reglas del sentir sin imposiciones ni desigualdades. ¡Que no se te vaya de ojo!