El 8 de septiembre se celebra el día de la Virgen de la Victoria en Málaga y el 8 de septiembre de 1928, la familia Franquelo inaugura su fábrica de cerveza en el barrio de El Perchel. Por nacer ese día se llamó así: Cervezas Victoria. Ya por aquel entonces, la empresa se fijó en la maquinaria y en los profesionales alemanes de la época para producir una cerveza que estaba llamada a ser malagueña y exquisita. Y quizá por eso, aparece en su botella un alemán limpiándose el sudor en los baños del Carmen.

Casi 100 años después, el 7 de septiembre de 2017, Cervezas Victoria inaugura su nueva fábrica. Un edificio moderno, versátil y que se ha convertido en un enclave cultural dentro de la ciudad. Su crecimiento ha sido exponencial y con un equipo malagueño que ha llevado a que la cerveza de Málaga pase de ser un producto anticuado a una referencia ligada a cualquier sarao en la ciudad. Por eso, queríamos sentarnos con Sergio Ragel, el responsable de relaciones externas de Victoria y seguramente la cara de la cervecera fuera de la fábrica. La historia de Sergio comienza mucho antes de la apertura de la fábrica. Con él abrimos La Lata y una Victoria.