Nos sumergimos en el rugido de Rock al Parque, más allá de los riffs y el pogo. Aquí el rock no solo se escucha, se vive como una expresión cultural; Te cuento cómo se sintió estar ahí, los momentos de comunión colectiva, los sonidos que sacuden, y cómo este festival sigue siendo un punto de encuentro para la diversidad musical, el arte urbano y la identidad bogotana.