
Sign up to save your podcasts
Or


Todos tenemos la imagen de Brasil emprendiendo proyectos realmente importantes. Y es que realmente es
un país inmenso, que tiene un territorio 3 veces más grande que el nuestro, un PBI 4 veces mayor, y 5 veces
más habitantes, que tardó en arrancar más que nosotros. Cuando éramos promesa mundial, ellos ni siquiera
sonaban en el concierto de las naciones. Desde el advenimiento de la democracia empezamos a empatar,
luego nosotros nos ralentizamos y ellos arrancaron, y más tarde nosotros nos detuvimos y ellos aceleraron.
Hoy nos miran por el espejo retrovisor, son la novena potencia mundial y activos miembros del BRIC, el
conglomerado de países de máxima potencialidad, que comparten con Rusia, India, y China. Tienen 17.000
km de fronteras terrestres de los cuales solamente 1.100 km son con Argentina, es decir solamente un 6%.
Pues en estos pocos kilómetros, este coloso mundial tiene en proceso de instalación 8 tiendas de frontera,
que son comercios minoristas libres de impuestos, en los que cada comprador, sea brasileño o turista, puede
usufructuar esta ventaja incomparable con compras de hasta u$s 300 por mes. Si, escucho bien, unos 40.000
pesitos por mes y por persona exentos de impuestos. Como ya les comenté, en el año 2012 Brasil autorizó
por ley la instalación en 33 ciudades gemelas de comercios duty free, o lojas francas. Lo real es que este
vecino gigante apunta a nuestros bolsillos con misiles de alto calibre, y eso es muy preocupante para la
economía misionera.
Hay quienes se esperanzan en que el gobierno nacional va a reglamentar el art. 10 de la ley 27264,
conocida como ley Pyme, que otorga incentivos fiscales a las micro, pequeñas y medianas empresas
ubicadas en zonas de fronteras. Este apartado especial otorgaría la facultad al Poder Ejecutivo
Nacional para compensar los desequilibrios económicos provocados por las asimetrías originadas en
razones de competitividad, o en las variaciones del tipo de cambio con los países limítrofes, y está
destinado a las empresas ubicadas en una franja de 50 kilómetros a contar del límite fronterizo
internacional que corresponda. Un total de 125 ciudades estarían comprendidas en estos
beneficios. Ni la más frondosa imaginación puede concebir lo que será la lucha descarnada para
imponerse por sobre el resto de interesados cuando se dé el debate. Es casi tan imposible como
lograr la rediscusión del porcentaje de coparticipación, que nos perjudica seriamente desde hace
muchos años, pero que no hubo ni hay posibilidad alguna de lograr cambiarlo.
El planteo inteligente para beneficiar a nuestra provincia tenemos que vincularlo a la singularidad
de su enclave, es decir, su muy particular ubicación geográfica, que salta a la vista del total de la
población argentina. Desde tercer grado los habitantes de nuestro país saben que estamos
acorralados por Paraguay y Brasil, que tenemos el 90% de nuestros límites con el extranjero. Esto es
una tremenda fortaleza que nos habilita para solicitar condiciones excepcionales para nuestro
normal funcionamiento. Y esas condiciones tan particulares están contempladas en la legislación
nacional; se denomina Área Aduanera Especial y consta en el Código Aduanero Nacional, es decir
que no hay que crear nada nuevo; hay que aprovechar algo que ya existe.
Esta condición nos
pondrá en situación sumamente ventajosa frente a los vecinos de ambos lados, y también respecto
al resto del país que tanto nos ha marginado. Nos merecemos esta consideración. El gobernador la
está solicitando a Buenos Aires, pero no veo que su entorno y toda la dirigencia misionera lo esté
acompañando.
Hay que convertir el pedido en clamor popular.
By Carlos TrevisanTodos tenemos la imagen de Brasil emprendiendo proyectos realmente importantes. Y es que realmente es
un país inmenso, que tiene un territorio 3 veces más grande que el nuestro, un PBI 4 veces mayor, y 5 veces
más habitantes, que tardó en arrancar más que nosotros. Cuando éramos promesa mundial, ellos ni siquiera
sonaban en el concierto de las naciones. Desde el advenimiento de la democracia empezamos a empatar,
luego nosotros nos ralentizamos y ellos arrancaron, y más tarde nosotros nos detuvimos y ellos aceleraron.
Hoy nos miran por el espejo retrovisor, son la novena potencia mundial y activos miembros del BRIC, el
conglomerado de países de máxima potencialidad, que comparten con Rusia, India, y China. Tienen 17.000
km de fronteras terrestres de los cuales solamente 1.100 km son con Argentina, es decir solamente un 6%.
Pues en estos pocos kilómetros, este coloso mundial tiene en proceso de instalación 8 tiendas de frontera,
que son comercios minoristas libres de impuestos, en los que cada comprador, sea brasileño o turista, puede
usufructuar esta ventaja incomparable con compras de hasta u$s 300 por mes. Si, escucho bien, unos 40.000
pesitos por mes y por persona exentos de impuestos. Como ya les comenté, en el año 2012 Brasil autorizó
por ley la instalación en 33 ciudades gemelas de comercios duty free, o lojas francas. Lo real es que este
vecino gigante apunta a nuestros bolsillos con misiles de alto calibre, y eso es muy preocupante para la
economía misionera.
Hay quienes se esperanzan en que el gobierno nacional va a reglamentar el art. 10 de la ley 27264,
conocida como ley Pyme, que otorga incentivos fiscales a las micro, pequeñas y medianas empresas
ubicadas en zonas de fronteras. Este apartado especial otorgaría la facultad al Poder Ejecutivo
Nacional para compensar los desequilibrios económicos provocados por las asimetrías originadas en
razones de competitividad, o en las variaciones del tipo de cambio con los países limítrofes, y está
destinado a las empresas ubicadas en una franja de 50 kilómetros a contar del límite fronterizo
internacional que corresponda. Un total de 125 ciudades estarían comprendidas en estos
beneficios. Ni la más frondosa imaginación puede concebir lo que será la lucha descarnada para
imponerse por sobre el resto de interesados cuando se dé el debate. Es casi tan imposible como
lograr la rediscusión del porcentaje de coparticipación, que nos perjudica seriamente desde hace
muchos años, pero que no hubo ni hay posibilidad alguna de lograr cambiarlo.
El planteo inteligente para beneficiar a nuestra provincia tenemos que vincularlo a la singularidad
de su enclave, es decir, su muy particular ubicación geográfica, que salta a la vista del total de la
población argentina. Desde tercer grado los habitantes de nuestro país saben que estamos
acorralados por Paraguay y Brasil, que tenemos el 90% de nuestros límites con el extranjero. Esto es
una tremenda fortaleza que nos habilita para solicitar condiciones excepcionales para nuestro
normal funcionamiento. Y esas condiciones tan particulares están contempladas en la legislación
nacional; se denomina Área Aduanera Especial y consta en el Código Aduanero Nacional, es decir
que no hay que crear nada nuevo; hay que aprovechar algo que ya existe.
Esta condición nos
pondrá en situación sumamente ventajosa frente a los vecinos de ambos lados, y también respecto
al resto del país que tanto nos ha marginado. Nos merecemos esta consideración. El gobernador la
está solicitando a Buenos Aires, pero no veo que su entorno y toda la dirigencia misionera lo esté
acompañando.
Hay que convertir el pedido en clamor popular.