
Sign up to save your podcasts
Or


Firmó un mingitorio con seudónimo, dejó de pintar para jugarajedrez, y cambió el arte sin producirlo. Marcel Duchamp no ofreció respuestas: sembró dudas, rompió reglas y convirtió lo absurdo en filosofía. Una idea que nadie pudo colgar… pero que todavía no deja de pesar.
By Andres Amadeo Jejen PaezFirmó un mingitorio con seudónimo, dejó de pintar para jugarajedrez, y cambió el arte sin producirlo. Marcel Duchamp no ofreció respuestas: sembró dudas, rompió reglas y convirtió lo absurdo en filosofía. Una idea que nadie pudo colgar… pero que todavía no deja de pesar.