Hacer lo que realmente quieres hacer y no lo que otros quieren que hagas. Ser quien realmente quieres ser, y no quien otros quieren que seas. Determinar qué objetivos quieres alcanzar, en lugar de permitir que las circunstancias determinen qué logras y qué no.
Según http://cidecame.uaeh.edu.mx/ ...
Vivir con propósito es utilizar nuestras facultades para la consecución de las metas que hemos elegido: la meta de estudiar, de crear una familia, de organizar nuestros archivos, de ganarnos la vida, de empezar un negocio nuevo, de hacer ejercicio, de dedicarles más tiempo a nuestros hijos, pareja, amigos, padres. Son nuestras metas las que nos impulsan, las que nos exigen aplicar nuestras facultades, las que vigorizan nuestra vida.
Vivir con propósito es vivir productivamente, es una exigencia de nuestra capacidad para afrontar la vida. La productividad es el acto de conservación de la vida plasmando nuestras ideas en la realidad, fijando nuestras metas y actuando para conseguirlas, el acto de dar la vida a los conocimientos, bienes y servicios.
Como forma de actuar en el mundo, la práctica de vivir con propósito supone las siguientes cuestiones básicas:
Asumir la responsabilidad de plantearnos metas y propósitos de manera consciente.
Interesarse por identificar las acciones necesarias para conseguir nuestras metas
Controlar la conducta para verificar que concuerda con nuestras metas.
Prestar atención al resultado de nuestros actos, para averiguar si conducen a donde queremos llegar.