La educación en hábitos nutricionales una de las actividades que se deben abordar en toda consulta cuyo objetivo sea la mejora y la promoción de la salud. Las medidas que vamos a comentar son generalistas, y en caso de determinadas poblaciones especiales o por ejemplo, deportistas, podrían tener matices, son una apuesta por la mejora de la calidad de la alimentación.
La alimentación es un PILAR FUNDAMENTAL EN NUESTRA CALIDAD DE VIDA. Está claro a estas alturas que conforma uno de los pilares básicos de nuestra salud junto con el ejercicio físico, la salud emocional y el descanso, ¿verdad?
Hay que promocionar LOS ALIMENTOS DE ORIGEN VEGETAL, que deben ser la BASE, de la alimentación. Hoy en día hay cada vez más evidencia científica de que debe constituir más del 50% de los alimentos que ingerimos cada día.
Esto no es solo porque sean más saludables si no porque disponemos de también cada vez más evidencia de que son más sostenibles. Los medios científicos se hacen eco de estas propuestas cada vez más. La semana pasada uno de los artículos del BMJ, es una prestigiosa revista de medicina, presentaba un estudio el que indica que las recomendaciones dietéticas nacionales deberían ser no solo más saludables, si no más sostenibles. Hay un proyecto denominado EAT-lancet, avalado por otra de estas revistas de medicina, que propone como objetivo un modelo dietético para 2050 en el que el consumo de vegetales, fruta, semillas y legumbres debe incrementarse un 50% respecto al actual para conseguir un patrón saludable.
La otra mitad del plato, para que sea saludable debe repartirse en granos enteros, fuentes de proteínas vegetales, frutos, aceites vegetales insaturados, y (opcionalmente) cantidades modestas de proteínas de origen animal. El resultado será una reducción del 50% respecto al consumo actual, de carnes y otros alimentos procesados.
La adopción de estos cambios se estima que podría general un descenso de la mortalidad general entre un 15 y un 25%
Recordar que una alimentación sostenible también pasa por no comprar en exceso, no tirar alimentos, usar las sobras en otras comidas (en cierta medida reciclar) y compartir comidas. Si es posible, utiliza alimentos de temporada y de cercanía.
El agua es la única bebida indispensable para la salud.
Estas estrategias son incompatibles con el consumo de alcohol y los ultraprocesados: platos precocinados, bebidas refrescantes, snacks, galletas, dulces, helados, batidos, zumos industriales, cereales para bebés, potitos, cervezas, vinos,etc.
Recordar que comer, es compartir buenos momentos, con tu familia, con los amigos o con un buen libro o música. Si no lo arruinarías con malas compañías, intenta también las malas elecciones. Y si no puedes, no te martirices por ello. El día siguiente será mejor.
Educar a los peques en la alimentación y en la participación de las comidas es un beneficio que quedará para siempre. Aprenden por imitación y no hay mejor educador que un padre. Así aprenderán las recetas de la familia y a cocinar casero desde pequeñitos, y eso es un legado que, junto con el deporte y la lectura, a mi criterio, no tiene precio.
Os dejo los archivos de los últimos macroestudios que abordan estos temas.
Espero que lo hayáis disfrutado y si teneis preguntas, dejarlas en comentarios o en mi Instagram @amaya.jimeno
https://www.amayajimeno.com/wp-content/uploads/2020/07/Dieta-mediterranea-y-riesgo-de-DM-Annals-2020.pdf
https://www.amayajimeno.com/wp-content/uploads/2020/07/Naghshi-Proteina-dietetica-y-R-de-muerte-y-CV-MBJ-2020.pdf
https://www.amayajimeno.com/wp-content/uploads/2020/07/Estruch-PREDIMED-NEJM-2019.pdf
https://www.amayajimeno.com/wp-content/uploads/2020/07/EAT-Lancet_Commission_Summary_Report_Spanish.pdf
https://www.amayajimeno.com/wp-content/uploads/2020/07/Zhong-Associations-of-processed-mear-unprocessed-meat-poultry-and-fish-and-RCV-Jama-2020.pdf